La temporada de cultivo 2022 en Argentina, comenzó con escasas reservas de agua en el suelo principalmente en la región Norte, condicionando la evolución del cultivo en términos de rinde y calidad.

La campaña agrícola 2022-23 se recordará como una de las más secas de la historia afectando a todos los cultivos de invierno de Argentina incluyendo la cebada.

Los efectos de la sequía, en términos de producción y calidad se traducen en:

1- Menor generación de granos por metro cuadrado, disminuyendo potencial de rinde y aumentando la tendencia a elevar tenores proteicos.

2- Mayor efecto de las heladas durante los periodos vegetativos debido a que el cultivo bajo estrés hídrico es más susceptible al frío, principalmente la cebada. Esto origina rebrotes tardíos que se traducen en heterogeneidad  en maduración y presencia de granos verdes en cosecha así como mayor presión de insectos (isocas desgranadoras) que originan daño por picado.

A pesar de que la sequía, las heladas tempranas cercanas a floración que fueron los eventos climáticos preponderantes, no se observaron golpes de calor intensos y generalizados durante el llenado de grano que combinado con el bajo número de granos generados se manifestó en buenos calibres en general.

Variedades como Charles, Jennifer y Sinfonia lograron excelentes resultados de granos retenidos sobre zaranda 2.5mm por encima de la media (>85,7%).

La cosecha resultó con valores de proteína de Cebada que oscilan principalmente entre 10,0% y 13,0%. 

Base al muestreo previo que se realizó en el campo, se segregaron proteínas de tal forma de poder asegurar la especificación de todo nuestro portfolio.

Resultados micriomalteos e industriales:

El micromalteo de variedades post cosecha, nos permite obtener información del potencial de las diferentes variedades y cómo estas variables impactarán en el proceso de malteo y elaboración de las cervezas.

En términos de tamaño físico de los granos, el calibre de la cebada / Malta no se vio afectado. Por lo que resultó un % de tamaño de grano en el tamiz >2.5 mm de 92,0 %. Esto no va a generar impacto en la molienda y, por lo tanto, en el rendimiento del Brewhouse. Con lo cual, en ese aspecto no se esperan cambios frente a la cosecha anterior.

Con respecto al nivel de proteína, si bien puede verse en general una tendencia mayor que la campaña anterior, se segregó la cebada para la producción de malta UMA, alcanzando en promedio valores cercanos al 11,0%. 

¿Qué podremos ver en la cervecería ?

La cosecha en la Zona norte del país no fue buena en términos de agua, con lo cual para la elaboración de malta en la planta de Punta Alvear, fue necesario traer un porcentaje mayor de cebada de la zona Sur del país. Este efecto provoca que en promedio la dormancia y sensibilidad al agua de la cebada aumenta. Esto puede evidenciarse como una disminución en el potencial enzimático o una ralentización en la modificación Citolítica, que en última instancia se observará en un menor índice de Kolbach o aumento de betaglucanos. 

Podemos ver en la figura 3 y 4 que ambos valores permanecen en especificación. Se observa si, una caída en el IK (recordamos que es la relación entre la proteína soluble y la total), pero es normal al inicio de la cosecha. 

Como dato relativo a inocuidad alimentaria, dado en nivel bajo de humedad que se registró en la mayor parte del año 2022, los valores de micotoxinas relacionados al crecimiento de hongos también fueron muy bajos.

FIG. 3

FIG. 4

También podés descargar el pdf del Reporte de Cebada 2023 desde acá.